Entre la parada de autobús, el rascacielos Anzeiger y la heladería, el pequeño quiosco pasa fácilmente desapercibido, pero quien se acerque se sorprenderá. La fachada acristalada, que incluso continúa bajo la típica ventana corredera de cristal, permite ver una colorida variedad de latas y botellas de bebidas.
Y si se mira más de cerca, se descubrirá que este pequeño puesto tiene mucho más que ofrecer de lo que cabría esperar a primera vista: una auténtica información privilegiada en el Steintor.