¿No tiene acceso a Internet en casa? ¿Necesitas hacer una copia rápida o comprar una memoria USB? La Büdchen de Tulpenstraße siempre está bien surtida de material de oficina.

Centro de urgencias para pisos de estudiantes: el quiosco de la Uni, en la Callinstraße, vende rollos de papel higiénico sueltos por un euro cada uno. Y también es un buen lugar al que acudir si tienes cualquier otra emergencia doméstica.

Sofisticada cultura de quiosco con 15 neveras: Gül's Kiosk ofrece bebidas para todos los gustos. Las cervezas locales son especialmente populares.

Idílico merendero: paseantes, clientes habituales y visitantes de los Jardines Reales se sirven bockwurst, pretzels, refrescos y cerveza en la llamativa casita del Georgengarten.

Kiosk Flacon, en Calenberger Neustadt, es ante todo un lugar de encuentro vecinal. Un canal dedicado en Instagram informa sobre los eventos. Y la selección de productos también es enorme.

Cerveza artesanal para los amantes de la cerveza: el Kultkiosk de la Lutherkirche se ha consolidado como una popular tienda especializada en cerveza artesanal en el barrio de Nordstadt.

La pequeña ventana a la felicidad: detrás de la escotilla, al principio de la Limmerstraße, se atiende a los madrugadores y trasnochadores desde las 5 de la mañana. ¡Salud por el Limmern!

En el quiosco Pfarrland, la gente se reúne para charlar con un café recién hecho o un chocolate caliente con chupito. Los clientes habituales disfrutan tradicionalmente de su cerveza embotellada en las mesas cubiertas del bar.

El clásico quiosco se alza en Kröpcke como una roca en el oleaje, en medio del estruendoso tráfico peatonal. Decenas de miles de personas pasan cada día por delante para comprar algo de comer.

Elegante, sostenible y con un ambiente único: en Gottfried's Feinkiosk puedes dejarte caer en el viejo sillón tapizado de la abuela y disfrutar de ponche de pera, capuchino de leche de avena o refrescos de moda.

En la pequeña tienda de la Königsworther Straße, un pequeño banco frente al escaparate invita al público que corre a quedarse.

Café fresco para charlar: el quiosco Basil Suleiman, en la calle Schaumburgstraße, abastece a Herrenhausen de bebidas calientes, una amplia gama de shisha y una gran variedad de tabacos aromatizados.